lunes, 29 de noviembre de 2010

Los desastres climatológicos han matado a 21.000 personas

La organización Oxfam International ha colocado un mensaje en una botella gigante que llegó a las playas de Cancún para pedir a los participantes de la Cumbre Mundial Sobre Cambio Climático aplicar medidas urgentes que frenen los desastres naturales extremos, que han costado la vida de 21.000 personas en 2010.
Esta cifra duplica el número de muertos por las mismas causas de todo el año 2009, cuando se alcanzaron las 10.000 víctimas. El asesor de incidencia de campañas para Latinoamérica y el Caribe de Oxfam, Antonio Gil, comentó que el mensaje "es urgente salvar vidas en Cancún", escrito en inglés y español, es una demanda de millones de niños alrededor del mundo que sufren los efectos del cambio climático.
Así se desprende del informe "Ahora más que nunca: unas negociaciones a favor de quienes más lo necesitan", que la organización Oxfam Internacional ha hecho público coincidiendo con el inicio de la Cumbre del Clima de la ONU de Cancún (México), que se celebra desde este lunes hasta el 10 de diciembre.
Una botella gigante de la ONG Oxfam con un mensaje para los políticos. | EfeSegún el informe, este año va así "camino de superar la media de fenómenos meteorológicos extremos registrados de los últimos diez años", que se sitúa en 770. Oxfam advierte también de que el año 2010 ha sido, además, uno de los años más calurosos, alcanzando los 53,7°C en Pakistán, "la temperatura más alta jamás registrada en Asia". Por esta razón, Oxfam pide a los participantes en las negociaciones de la ONU que "actúen con urgencia y encuentren soluciones", tras un año "lleno de desastres climatológicos, temperaturas récord, inundaciones y un incremento notable del nivel del mar".
En Cancún, Oxfam demanda la creación de un fondo para el cambio climático, "para que el dinero llegue a quienes más lo necesitan y quienes mejor lo van a emplear".
Las organizaciones ecologistas también han lanzado sus reivindicaciones para esta cumbre. Así, Greenpeace espera que los gobiernos sienten las bases de un compromiso internacional legalmente vinculante "que salve el clima". Para ello, reclama a España que trabaje para que se alcance un acuerdo sobre el límite de aumento de la temperatura global de 2ºC "como frontera infranqueable" y para fomentar el avance en la definición de "fuentes innovadoras" de financiación de la lucha internacional contra el cambio climático.
Aunque no espera "que en Cancún se cierre el acuerdo que el mundo necesita" para combatir el fenómeno, WWF "sigue pidiendo un acuerdo ambicioso, justo y vinculante". Entre los puntos que esta organización considera imprescindibles, destaca la necesidad de consolidar a la ONU como el marco adecuado para un acuerdo global y de reconocer la gran brecha que existe entre las promesas de reducción de la Cumbre de Copenhague y los compromisos necesarios.
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2010/11/29/ciencia/1291028192.html